Para mantenerse competitivos, impulsar la innovación y dar respuesta a las demandas cambiantes de los consumidores, quienes pertenecen al segmento heladero necesitan estar atentos a las tendencias helados que se imponen en el mercado.
Ahora bien, ¿cuáles son los lineamientos que marcarán el paso en los próximos meses e impulsarán el crecimiento del rubro? Te lo contamos en esta nota.
Industria heladera, un segmento en expansión
Mordor Intelligence indica que, si bien durante 2022 el continente europeo dominó el mercado de los helados (representando una cuota del 41,82%), para el periodo 2023-2029 América del Sur se proyecta como el mercado de mayor expansión, con cálculos que contemplan una tasa de crecimiento anual (CAGR) del 4,93%.
De acuerdo al relevamiento de esta organización, el viraje hacia una alimentación más saludable de la población sudamericana lleva a que los consumidores se inclinen por opciones de helado bajo en grasa, sin lactosa o reducido en azúcar, como los gelato zero y el que ofrece la marca Frosz Gelato Fit.
Estos datos ponen de manifiesto la importancia que tiene elaborar y ofrecer helado a medida, es decir, productos que se adapten a las necesidades y preferencias nutricionales de los consumidores.
4 tendencias helados vigentes a nivel global
¿Cómo pueden los heladeros mantenerse competitivos y satisfacer las demandas y las expectativas de los consumidores? ¿Qué estrategias deben desplegar para conquistar cada vez más clientes y aumentar las ventas?
La respuesta se encuentra al analizar las tendencias helados que marcarán el pulso del mercado durante los próximos meses.
Helados premium, pero no saturados
Aunque existe una demanda creciente de helados premium —entendida como la inclusión de sabores innovadores y el uso de ingredientes de alta calidad que exaltan el disfrute—, hay una suerte de inclinación hacia la indulgencia.
¿Qué implica esto? Que, al incorporar ingredientes como chocolate, frutos secos o galletas, se debe procurar que trabajen en armonía con el helado de base a fin de garantizar una experiencia satisfactoria para el consumidor.
Si el balance no es el adecuado, se corre el riesgo de que la adición de estos alimentos aumente la cremosidad y la suntuosidad del helado, saturándolo.
En líneas generales, un helado premium posee un contenido de grasa de alrededor del 15 o 16 % y es bastante denso. Si se agregan ingredientes, aumenta el contenido de grasa, lo que podría hacer que el producto sea demasiado pesado.
¿Cómo se resuelve esta cuestión? Haciendo que la base del helado sea más ligera, reduciendo el contenido de grasa y/o aumentando el aireado.
Helados que demoran en derretirse
Para los consumidores, un helado que se derrite rápidamente es sinónimo de una mayor probabilidad de ensuciarse o mancharse y, lo que es peor, de un menor tiempo de disfrute refrescante.
Entonces, ¿cómo hacer que el placer y la frescura duren más tiempo? Creando helados que demoren en derretirse. Esto se puede lograr de dos maneras. La primera estrategia consiste en reducir la cantidad de agua en la mezcla, incrementando los sólidos de leche no grasos o bien los sólidos no provenientes de azúcares, elementos que hacen que el producto se torne más compacto y viscoso.
La segunda forma de conseguirlo es a través de la incorporación de elementos que demoren el proceso de fundido, por ejemplo, Bassocremm MR.
Este polvo de aroma ligeramente lácteo retarda el derretimiento, aportando cremosidad y aireado a la mezcla. Se fabrica a partir de grasa vegetal, carbohidratos, sólidos de leche no grasos, estabilizantes y emulsionantes.
Helado saludable
Mantener una alimentación saludable se ha convertido en el objetivo de muchos consumidores.
Cada vez son más las personas que buscan alimentos que, además de ser sabrosos y de excelente calidad, sean nutritivos. Por supuesto, el helado no es la excepción.
Para los heladeros, esto supone el desafío de crear productos beneficiosos para la salud, sin resignar sabor ni textura.
Pero, ¿cómo resolver este reto? Es posible crear postres helados agregando ingredientes saludables, como frutas o proteínas, o bien fortificar el helado con probióticos o prebióticos.
Otra posibilidad es cambiar los insumos lácteos por leches vegetales y reemplazar la fuente de materia grasa (dejando de lado la crema de leche) a fin de crear helados veganos que atraigan a quienes prefieren este tipo de alimentación o son intolerantes a la lactosa o la proteína de leche de vaca.
Helado sustentable
Además de alimentos saludables, muchas personas procuran que los productos que consumen sean sustentables, es decir, que contemplen el cuidado del medio ambiente.
Para cautivar este segmento de clientes, la industria heladera no puede ser ajena a esta tendencia.
Apoyándose en los avances de la tecnología, diferentes empresas y startups han desarrollado insumos sustentables para heladerías. Envases y cucharas biodegradables, palitos de helado comestibles y helados que pueden conservarse a una menor temperatura para reducir consumo energético son algunas de las innovaciones vigentes.
Los comercios que incorporen este tipo de elementos no solamente contribuirán con la protección del planeta, sino que también serán exitosos entre aquellos consumidores que priorizan las marcas con conciencia ambiental.
¿Cuáles de estas tendencias helados planeás incorporar en tu local? Si necesitás asesoramiento sobre insumos que te permitan ofrecer productos premium, saludables, sustentables y que prolonguen la experiencia de sabor de los clientes, contactanos.
febrero 15, 2024