Frente a la creciente expansión del veganismo como una opción alimentaria, cada vez son más las personas que deciden abrir negocios apuntados a satisfacer esta demanda. En lo que respecta al rubro heladero, la comercialización de helado vegano es una de las tendencias que se impone con más fuerza en el sector.
Si bien hay comerciantes que deciden incorporar alternativas de helados libres de productos animales en su oferta de gustos, combinándolas con los sabores “tradicionales”, otros van más allá.
¿Cómo abrir una heladería vegana? ¿Qué tener en cuenta para lograr un negocio exitoso? Te lo contamos en esta nota.
Lejos de reducirse, en los últimos años la cantidad de personas que adoptan un estilo de alimentación vegano o vegetariano aumentó de manera sostenida.
No obstante, en la actualidad este porcentaje es notablemente superior. De hecho, un sondeo realizado por este organismo en 2022 indica que el número de veganos se redobló, representando entre un 20% y un 21% del total poblacional argentino.
Ante este escenario, el mercado responde elaborando productos que satisfagan las necesidades de este perfil de clientes. El rubro heladero no es la excepción.
El helado tradicional no responde a la alimentación vegana, dado que está hecho con productos de origen animal.
El helado vegano se revela entonces como una alternativa clave para llegar a los consumidores que eligen el veganismo, así como para atraer a aquellas personas que tienen alergias o intolerancias a la lactosa, ampliando el mercado.
Aunque algunos heladeros incorporan variedades de helados veganos en su carta de productos, ofreciéndolos como una alternativa a los tradicionales, existen comerciantes que van un paso más allá y deciden montar su propia heladería vegana.
Para lograr este objetivo, necesitan atravesar una serie de etapas.
El proceso comienza con una evaluación exhaustiva del mercado. Esto implica analizar los productos que se comercializan en heladerías veganas ya en funcionamiento, descubriendo cuáles son los más solicitados (así como los menos pedidos), la estrategia de precios y las opiniones de los clientes. Esta evaluación también debe identificar las debilidades de otros establecimientos, a fin de capitalizarlas para convertirlas en ventajas competitivas.
Asimismo, es fundamental determinar el público objetivo, construyendo un perfil de cliente ideal de acuerdo a las características demográficas y comportamentales de las personas a las cuales se quiere atraer. Esto ayuda a construir mensajes y ofertas apuntadas a sus necesidades.
En este punto, monitorear las discusiones que se dan en las redes sociales y en las plataformas online es clave para recabar información sobre lo que los clientes esperan encontrar en el helado vegano.
A continuación, es momento de encontrar una ubicación adecuada para la heladería vegana.
Para tener un comercio que atraiga a clientes y permita el crecimiento del negocio, es necesario identificar zonas de alta demanda de productos veganos y vegetarianos, como, por ejemplo, barrios en los cuales hay colegios o universidades, o bien áreas con gran circulación de personas.
No olvides tener en cuenta el poder adquisitivo del barrio en el cual asentarás tu heladería, ya que si comercializás productos con costos medianos o altos, necesitarás una audiencia que pueda costearlos.
El desarrollo de un plan de negocios integral es esencial para el éxito de una heladería especializada. Esta planificación funciona como una hoja de ruta que describe los objetivos y las estrategias para alcanzarlo.
Además de definir la misión y la visión, es necesario determinar qué productos y servicios se ofrecerán en el establecimiento (entrega a domicilio, pickup, cafetería, etc.) y delinear la estrategia de marketing que se usará para dar a conocer la marca y conquistar a los clientes.
No nos olvidemos de las finanzas. Para montar una heladería donde se venda helado vegano —o cualquier otro tipo de helado—, es fundamental saber cuál es el capital con el que se precisa contar.
Las inversiones son necesarias para varios fines, como, por ejemplo, comprar o alquilar el espacio físico, adquirir objetos decorativos, luminarias, máquinas para elaborar productos, exhibidores, vitrinas y cualquier elemento que tenga que ver con la ambientación del local y la contratación de personal idóneo.
Si no se cuenta con las habilitaciones pertinentes para vender o producir comida, es imposible abrir un comercio ligado a la alimentación.
Por eso, uno de los pasos clave para montar una heladería vegana es conocer las reglamentaciones vigentes en términos de venta de alimentos y obtener los permisos necesarios para la explotación comercial.
En este sentido, existe la certificación IRAM-V que, basándose en la norma internacional ISO 23662, garantiza que los productos que la obtienen cumplen con las definiciones y los criterios técnicos para productos veganos, vegetarianos, hechos a base de plantas y 100% vegetales, así como materias primas con estas características.
Llegó el momento de la parte creativa. Por último, es preciso seleccionar aquellos productos que formarán parte de la carta de sabores veganos.
La elección tendrá que ver con las preferencias de los clientes, expresadas en la investigación de la audiencia que se hizo previamente.
Más allá de las diferentes variedades que se incorporen, para que la heladería vegana sea un éxito, es fundamental trabajar con materias primas de calidad.
En Laboratorios Basso, contamos con diferentes opciones de insumos veganos como bases zero con bajo contenido glucídico y de materia grasa, bases neutras, estabilizantes y hasta un kit para elaborar diferentes sabores.
Si estás pensando en incursionar en el mundo del helado vegano, entrá en contacto con nosotros.